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| Buscando el perdón | |
| | Autor | Mensaje |
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Narrador Cronista
Cantidad de envíos : 130 Fecha de inscripción : 05/09/2009
| Tema: Buscando el perdón Lun Ago 23, 2010 12:40 pm | |
| El monasterio de Arkángel, el lugar más antiguo de la zona, era azotado por una creciente ventisca que se había levantado en menos de una hora. El mortal toque helador del viento podría matar a un mortal si este no se cuidaba pues facilmente podrían llegarse a temperaturas que bajaban de los treinta grados bajo cero y la nieve, que iba y venía al son del baile de las corrientes, impedía que se pudiera ver más allá de la propia nariz.
Pero en el interior del monasterio el calor y la tranquilidad reinaban de forma imperturbable, parecía un remanso de paz frente a la tormenta que se desataba en el exterior, y aunque por el día los mortales eran los señores de aquel santo lugar por la noche los señores de la oscuridad y de las sombras eran los amos de aquel antiguo templo.
Una solitaria figura se paseaba por los fríos pasillos del templo, parecía dirigirse con prisa a un lugar, y en efecto así era pues se iba hacia la nave central de la iglesia (venía de las cárceles o habitaciones del monasterio).
Esta solitaria figura vestía con los sagrados hábitos del sacerdocio y aunque portaba todos los signos cristianos en su mirada podía denotarse una oscuridad no propia de los ignorantes mortales. Caminaba con cierta prisa y sin prestar demasiada atención a la ventisca que rodeaba al edificio y, justo antes de ingresar en el templo un hombre de elevada estatura y ario porte aparecio al lado de la entrada, con la rodilla clavada en el suelo, y diciendo:
-Mi señor, todo está preparado, pero ha surgido un problema...
El oscuro sacerdote, sin dignarse a mirar al recien llegado, respondio diciendo despectivamente:
-¿Que clase de problema Herman?
-Eh... Anthony y el resto no han vuelto todavía su santidad... LLevan horas de retraso y pronto amanecerá.
-Bueno encarga a un par de ovejas que los busquen, tenemos asuntos más importantes que cumplir que buscar a unos cuantos borrachos en su noche libre, ya recibirán su merecido castigo-Dijo para, sin decir una sola palabra más, internarse en el interior de la iglesia abriendo la puerta lateral que comunicaba al monasterio con esta mientras el "guardian" desaparecia entre las sombras, como había aparecido.
En el interior de la nave había un gran altar de mármol blanco al final del crucero y este altar había una chica joven, de no más de 18 años, encadenada y sentada de rodillas mirando hacia la imagen mayor del señor.
El sacerdote, caminando con aire solemne, se acercó a la muchacha mientras murmuraba arcanas palabras hasta terminar posando su mano diestra sobre la frente de esta diciendo:
-Bueno mi niña... Cuentale al señor tus pecados.
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| | | Sloan Lobezno
Cantidad de envíos : 10 Fecha de inscripción : 22/08/2010
| Tema: Re: Buscando el perdón Lun Ago 23, 2010 7:00 pm | |
| Una fría noche de invierno se presentaba ante las grandes puertas del Monasterio de Arcángel, una noche nublada, ventosa y oscura sin la presencia de la hermosa luna, y suficientemente tenebrosa o sombría, debido a la presencia de los seres de la oscuridad también llamados vampiros o chupasangre, los cuales se encontraban al acecho de los débiles mortales.
Aún así un encapuchado llegó a las puertas del mismo y se paró frente a ellas mirándolas de arriba hacia abajo, sin dudarlo siquiera un par de segundos, este ingresó tras empujarlas con sus dos manos, haciendo que los pocos mortales y vampiros que se encontraban en su interior se voltearan a observarlo tras sentir el olor a muerte que llevaba encima. Al cerrarse estas puertas a sus espaldas, un silencio sepulcral invadió al sagrado lugar, un lugar hecho en honor a los santos, santos que se mancharían de sangre cuando las acciones del encapuchado comenzaran a ser efectuadas.
El encapuchado se quedó parado firmemente mirando hacia las reliquias del lugar, sintiendo la presencia de los vampiros y mortales que comenzaban a atemorizarse con su sola presencia. Pronto pudo verse como el enigmático sujeto se quitó la capucha exhibiendo su rostro moreno y su cabellera azabache sostenida con un pañuelo de seda azulado a la altura de la frente. - ¿Donde? -. Musitó con una voz grave y totalmente masculina, que apretaba los puños de sus manos y hacía tronar todos los huesos de las mismas. - ¡¿DONDE ESTAS?! -. Gritó segundos más tarde, quedándose quieto y callado esperando la aparición del chupasangre más fuerte del Monasterio, quien probablemente sentiría el olor a sangre vampírica, impregnada sus ropajes y cuya esencia era percibida perfectamente por quien lo buscaba. | |
| | | Narrador Cronista
Cantidad de envíos : 130 Fecha de inscripción : 05/09/2009
| Tema: Re: Buscando el perdón Lun Ago 23, 2010 8:54 pm | |
| El licántropo entró en el interior del gran templo cristinano, la oscuridad reinaba en el lugar pues ninguna casi ninguna vela iluminaba el interior, aunque algun que otro cirio daba algo de luz al lugar. Al final del lugar el hombre lobo podría dislumbrar la desangrada y apuñalada figura de una joven muchaba muerta posada sobre el gran altar de la inglesia, la cual aun tenía un puñal clavado sobre su corazón.
No se veía, por ninguna parte, al causante de aquel atentado contra la vida mortal, de aquel asesinato, pero Sloan sabía y sentía que no estaba solo, y no se equivocaba, pues en apenas unos instantes después observó que algo en el exterior de la iglesia se movía y se acercaba hacia las puertas del templo, algo lento y podrido (por su olor)...
Una malévola risa se escuchó cuando Murtagh vio que en la puerta de la iglesía habrían, al menos, diez zombis que con torpes pasos se acercaban hacía él... Cerrando cualquier vía de escape que viera, por el momento. | |
| | | Sloan Lobezno
Cantidad de envíos : 10 Fecha de inscripción : 22/08/2010
| Tema: Re: Buscando el perdón Lun Ago 23, 2010 9:51 pm | |
| La mirada ambarina del enigmático encapuchado, quien ahora exhibía su sedosa cabellera de color azabache y ocultaba su cuerpo con una túnica andrajosa, se posó pronto y en la distancia sobre los ojos sin vida de aquella muchacha que sostenía con una herida en su pecho la hoja de un puñal. Aún así debió concentrarse en otras cosas más importantes a pesar de tener pena e ira por tal imagen, concentrándose sobre todo en el fétido olor que provenía desde las afueras del Monasterio, el cual pronto se expandiría por todo el recinto sagrado ahogando a los mortales por la vomitiva putrefacción que aumentaba con el tiempo.
Dicha terrible y putrefacta emanación provino de un par de entes no-muertos también conocidos como zombis, los cuales ingresaron por la misma puerta que el encapuchado y que ejecutando movimientos torpes se acercaban poco a poco hacia él con la intención de atacarlo o asustarlo por su simple y escandalosa presencia. Sin embargo, el encapuchado era algo más que un mortal, era un guerrero bendecido con una gran maldición que debería acarrear toda su vida sin importar que hiciera, era un Licántropo, una impulsiva criatura exageradamente poderosa.
Y así fue como comenzó la batalla de aquel guerrero Licántropo. Este mismo tomó la iniciativa extendiendo sus brazos hacia ambos lados y por detrás de sus hombros, haciendo que aquella túnica que vestía se desprendiera de su cuerpo y cayera sobre el suelo de mármol. Pronto pudo verse como entre sus manos sostenía un par de hachas finamente trabajadas, teniendo mangos de madera reforzada y un par de hojas suficientemente resistentes para parar un fuerte impacto, aunque también, suficientemente ligeras para permitirle a su portador un sencillo blandir. - Al ataque... -. Musitó.
Fue ahí que tras pronunciar esas palabras el Licántropo comenzó a correr con sus brazos extendidos hacia atrás de igual forma que antes, encaminándose hacia un zombi, el más próximo a él, y cuando este estaba a punto de atacar, impulsándose hacia el torso del mismo a modo de embestida, con la intención empujarlo y derribarlo junto a alguno que otro de los que lo acompañaban. Mientras tanto, el Licántropo agitaba sus manos hacia adelante e intentaba cortar con sus hachas, desde la cintura hacia arriba, a dos muertos vivientes que se acercaban por sus laterales. Un movimiento bastante preparado en el cual se vieron involucrados varios atributos del guerrero, su velocidad, su fuerza, y lo más importante, sus reflejos. | |
| | | Narrador Cronista
Cantidad de envíos : 130 Fecha de inscripción : 05/09/2009
| Tema: Re: Buscando el perdón Lun Ago 23, 2010 10:12 pm | |
| Los diez zombis entraron en la iglesia y se dirigieron, lenta y torpemente, hacia el licántropo que había irrumpido ruidosamente en el lugar. Superaban ampliamente en número al solitario guerrero encapuchado que, con sus hachas, había acabado rapidamente con dos zombis cercenando el cuerpo de ambos por la mitad y haciendo caer al primero que golpeo junto con otros de los suyos, ganando segundo cruciales con ello.
Pero tras esto los zombis rodearon a Sloan mientras este podía observar como otros cinco zombis mas entraban en el lugar para unirse a los suyos y reemplazar a los caídos. El olor que despredían era, como poco, repugnante pues muchos parecían haber sido enterrados hace poco mientras que algunos parecían llevar años bajo tierra (mostrando gusanos en las cuencas de sus ojos). Algunos tenían los organos internos al aire, a medio descomponer, y otros aun portaban las ropas con las que habían sido enterrados... El panorama era diverso pero desolador y agobiante pues todos se lanzaban vorazmente con gritos y lamentos hacia el licántropo.
Ahora había cinco zombis que se lanzaban contra Sloan, uno por el frente para morder el hombro de este, uno a cada uno de sus laterales para mordiquear sus brazos y otros dos por la espalda para, en el caso de uno, agarrar sus piernas y tirarlo o, en el caso de otro, agarrar su cuello para devorarlo en una presa mortal.
El licántropo sabía que el invocador de aquellos seres debía estar en aquel lugar, sentía su oscura presencia, y no dudaba en que estuviera oculto en las sombras... Observando... | |
| | | Sloan Lobezno
Cantidad de envíos : 10 Fecha de inscripción : 22/08/2010
| Tema: Re: Buscando el perdón Lun Ago 23, 2010 11:19 pm | |
| El Licántropo fue rodeado por cinco muertos vivientes que atacaron sobre diferentes puntos de su cuerpo con la única y simple intención de matarlo en cuestión de unos pocos instantes. Sin embargo, en los segundos que se le otorgaran tras la principal embestida sobre uno de los zombis, el Lobezno logró posar sus pies de tal forma que pudo arremeter a tiempo sobre el muerto que le atacaba directo al cuello, esquivando al resto de ellos y atacando de forma frontal con el borde superior sus hachas, las cuales llevaba frente a sí mismo para golpear a su objetivo fuertemente en el estomago y así lanzarlo varios metros sobre una columna de madera.
De ser correctamente efectuados estos movimientos, el Licántropo continuaría su camino corriendo hacia adelante, lanzando una especie de hachazo doble con sus dos armas sobre aquella columna en la que debió impactar el zombi, obviamente atravesando primero el cuello del mismo y continuado con el apoyo de parte de la edificación, cuya fuerza probablemente cedería ante el potente ataque de la bestia en su forma humana, haciendo que parte del techo de aquel Monasterio se derrumbara sobre todos esos zombis que intentaron atacarlo segundos atrás.
El putrefacto olor de aquellas criaturas comenzaba a impregnarse en la piel del Lobezno, quien a pesar de estar concentrado en el combate, olía y olía tratando de percibir el lugar exacto en el cual su verdadero enemigo se encontraba. La oscuridad era un problema, el Licántropo de orbes ambarinos debía ingeniárselas para iluminar el lugar, y pronto lo haría, cuando estuviera libre de enemigos. | |
| | | Narrador Cronista
Cantidad de envíos : 130 Fecha de inscripción : 05/09/2009
| Tema: Re: Buscando el perdón Lun Ago 23, 2010 11:56 pm | |
| Sloan uso los preciados segundos de los que disponía tras derribar al par de zombis para asegurar su posición, recapacitar y, sobretodo, actuar. Golpeando al zombi que se lanzaba contra su espalda logró que este cayera sobre una columna interponiendo sus hachas entre él y el muerto para, asentandolas, hacer que se empotrara contra la columna al tiempo en que intentaba esquivar a los restantes zombis.
Logró evitar las presas, los agarres y la mayor parte de los "abrazos" de los muertos pero no pudo evitar que los dientes de uno e los zombis se clavaran en su hombro diestro mientras golpeaba al zombi, ya muerto de verdad, que estaba empotrado contra la columna.
Las hachas se clavaron en la columna de la iglesia con el poderoso golpe causado, dejando "indefenso" momentaneamente al licántropo aunque en cualquier momento podría extraerlas, tran solo era cuestión de segundos.
En ese momento Sloan podría darse cuenta que aunque había acabado con un zombi, otro más ocupó su lugar haciendo que los restantes se lanzaran para agarrar sus piernas y tirarlo, en caso de uno, morderle el cuello, el otro hombro y el costado diestro... Mientras el primero aun mantenía su mordisco que aunque no era ni mortal ni profundo si era molesto.
Por otro lado en la iglesia entraron otros cinco zombis más, parecía que la horda no tenía fin, pues todos rodeaban al licántropo y este debía hacer algo pronto si no quería ser superado por los zombis que, aunque no habían logrado nada por el momento salvo una mera herida superficial, acabarían venciendolo por mera superioridad numérica.
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| | | Sloan Lobezno
Cantidad de envíos : 10 Fecha de inscripción : 22/08/2010
| Tema: Re: Buscando el perdón Mar Ago 24, 2010 7:12 pm | |
| Aquel gran tumulto de zombis comenzaba a hacerse molesto para el guerrero, incluso más luego de que recibió una herida superficial a la altura de uno de sus hombros mientras era tomado desde diferentes partes de su cuerpo por muchos otros putrefactos muertos vivientes. Todos estos enemigos se aferraban a él reduciendo su movilidad poco a poco. Ante la fuerza producida por la gran cantidad de muertos que tenía sobre sí, el Licántropo se dejó llevar por sus impulsos, comenzando a escupir espuma por la boca, mientras que sus ojos, los cuales se inyectaban en sangre, cambiaban a un intenso color carmesí, cambio que anunciaba la más terrible metamorfosis del sujeto.
Los músculos del Licántropo comenzaron a ensancharse y endurecerse poco a poco, no mucho más de lo que ya estaban, pero tras finalizar la etapa de transformación su cuerpo se vería más ensanchado que antes además de que su altura aumentaría varios centímetros de una manera clara y totalmente visible, incluso a varios metros de distancia. Por todo este hecho las vestimentas del individuo se desprendieron de su cuerpo automáticamente, lo cual terminaría dejándolo totalmente desnudo y en la intemperie, justamente en el momento en el cual volviera a su forma humana.
Pasada aquella parte de la metamorfosis, una nueva entraría en acción. El pelaje del Licántropo comenzó a emerger desde los poros de su cuerpo, un pelaje blanquecino y con ciertos tonos en un color beige claro en algunas zonas robustas como las de los omoplatos y los bíceps. Las garras de ambas extremidades emergieron de forma instantánea, demostrando que la transformación se encontraba totalmente finalizada y el Hombre Lobo estaba dispuesto a luchar. - Sloan… Murtagh. -. Dijo la bestia para darse a conocer, quería que su rival recordara su nombre a la hora de su ejecución, pues esta sería lenta y dolorosa, como en el impulso siempre anhelaba provocar.
Dominado por su propia rabia, el Hombre Lobo ahora bien reconocido como Sloan Murtagh, comenzóa a mover poco a poco sus extremidades imponiendo gran fuerza, de manera pronta mientras comenzaba a rugir poco a poco, haciéndolo de una forma totalmente bestial en los últimos momentos, momentos en los cuales intentaría desprenderse de sus agresores, preparándose para destrozarlos con sus fuertes garras ni bien estuviera libre para hacerlo. | |
| | | Narrador Cronista
Cantidad de envíos : 130 Fecha de inscripción : 05/09/2009
| Tema: Re: Buscando el perdón Mar Ago 24, 2010 8:46 pm | |
| El gran hombre lobo se alzó en todo su esplendor, rugiendo a sus enemigos (los cuales no parecieron temerlo pues estaban muertos), y al hacerlo golpeo y empujó a un par de zombis que salieron despedidos por los aires. Tras esto comenzó a morder, arañar y desgarrar todo lo que encontró a su paso... Los zombis, lentos y torpes, no podían esquivar sus brutales golpes y al ser golpeados se convertían en amorfas masas de carne putrefacta.
Uno a uno todos los zombis fueron cayenda presas de la incontrolable ira del licántropo que, sin pensarlo e impulsado por su rabia, atacaba y elimaninaba a todo ser que pudiera moverse sin pensar siquiera en sus actos o si era o no amigo u enemigo. Realmente daba igual, todo se reducía al mero placer de destruir y de acabar con todo lo que encontrara a su paso... No veía los repugnantes rostros de los hombres y las mujeres muertas que destrozaba sino cuerpos, cuerpo que se movían y que debía destruir...
Pasado poco más de un minuto ya nada quedaba de la hordi zombi, salvo un monton de carne y de huesos podridos, y el silencio se hizo en el lugar, roto tan solo por la irregular respiración de Sloan que aun estaba sediento de sangre... Fue entonces cuando de entre las sombras aparecieron alrededor de Sloan, nada más y nada menos, que cinco tencátulos que se abalanzaron a por las extreminades del licántropo y a rodear su cintura para apresarlo y atraparlo en una mortal presa que buscaría romper sus huesos (algo que tardaba mucho en regenerar).
La rapidez de estos tectáculos era mortal, vertiginosa y fugaz.... Y de entre la oscuridad se escucho el sonido de una malévola risa que decía:
-Adelante Sloan, esto solo acaba de comenzar...
Aquellos tentáculos pillarían desprevenido al licántropo pues no se esperaría tan jugada, estaba curado de todas las heridas causadas por los zombis gracias a la regeneración pero habría que ver cuanto tiempo permanecía así... | |
| | | Sloan Lobezno
Cantidad de envíos : 10 Fecha de inscripción : 22/08/2010
| Tema: Re: Buscando el perdón Mar Ago 24, 2010 11:42 pm | |
| - Spoiler:
# Atributos: - Fuerza: 4 (+4 por metamorfosis) - Resistencia: 2 (+3 por metamorfosis) - Velocidad: 3 (+2 por metamorfosis) - Agilidad: 4 (-1 por metamorfosis) - Percepción: 3 - Rabia: 2
El frenesí provocado por la metamorfosis fue completamente útil para destrozar a la maraña de muertos vivientes que se colgaba encima del Licántropo e intentaba dañarlo con movimientos torpes y lentos, aunque con cierta fuerza considerable capaz de hacer sentir el dolor al Hombre Lobo aunque sea por unos pocos segundos. Aún así la regeneración permitió calmar aquellos dolores, los cuales como bien se mencionó fueron pasajeros, al menos por breves momentos.
Tomando por desprevenido al Licántropo, cinco tentáculos surgieron de entre las sombras cual demonios de la oscuridad, buscando atrapar las extremidades y cintura del mismo para triturar sus huesos y dejarlo fuera de combate. No obstante, Sloan se permitió el intentar deshacerse de ellos, principalmente haciendo un veloz movimiento con su pierna derecha, la cual levantó y lanzó contra el miembro que intentaba capturarla, buscando golpearla, aplastarla contra el suelo y ejercer presión, para de esta manera amputarla con suma facilidad. Mientras tanto, Sloan era atrapado por los demás tentáculos, tomado por las muñecas y el tobillo siniestro, este no vio más remedio que hacer fuerza, haciendo fuerza con todos sus músculos, para así retardar el rompimiento de los huesos, mientras que con su brazo izquierdo jalaba el tentáculo que lo tomaba, para luego intentar morderlo con su feroz y fuerte mandíbula, la cual podría cortarlo, otorgándole la liberación de la extremidad de manera fácil y correcta.
Todo era cuestión de unos pocos segundos. Sloan probablemente lograría retardar tan solo un corto lapso de tiempo el rompimiento de su muñeca derecha y apoyo inferior izquierdo, pero aún, y a pesar de que muy difícil sonara, tal vez dicho apoyo, gracias a la fuerza de los músculos sus patas, solo recibiría un doloroso resentimiento ante la presión del tentáculo, pues lo más probable es que la bestia, ni bien pudiera zafarse de algún tentáculo, lo primero que haría sería intentar atacar al miembro que aprisionaba a su pierna buscando cortarla con sus garras o despedazarla mientras su muñeca derecha era quebrada con suma facilidad, dándole inutilidad al brazo y una mayor rabia al Licántropo. | |
| | | Narrador Cronista
Cantidad de envíos : 130 Fecha de inscripción : 05/09/2009
| Tema: Re: Buscando el perdón Miér Ago 25, 2010 2:17 pm | |
| - Spoiler:
Atributos: - Fuerza: 4 - Resistencia: 2 - Velocidad: 5 - Agilidad: 3- Percepción: 3 - Sangre: 5 Los tentáculos se lanzaron con velocidad y agilidad contra el licántropo, logrando atrapar sus muñecas y su cintura sin realizar un gran esfuerzo...Sloan, haciendo un agil movimiento logró esquivar y pisar hasta destruir el tentáculo que se lanzó contra su pierna diestra pero aquella alegría duró poco pues, desde el mismo lugar del que surgio, aparecio otro nuevo tentáculo que se lanzó de nuevo contra la pierna diestra del licántropo para atraparlo. En cambio, la pierna siniestra, no pudo evitar ser atrapada en una mortal presa, como el resto del cuerpo, por lo que Sloan quedaba atrapado en una mortífera presa de la que, por el momento, no podría escapar. Haciendo uso de su monumental fuerza evitó que aquellos tentáculos acabaran destruyendo sus huesos, por lo que resistio la presión que aquellos seres ejercían pero no sabía cuanto tiempo podría resistir antes de cansarse, pero tan solo había ganado tiempo, un tiempo precioso y muy valioso. En aquellos momentos, de entre las sombras, surgio una gran nube de oscuridad más negra que la más oscura de las noches y que impedía que se pudiera ver a traves de ella... Esa nube de oscuridad cubrio al licántropo y varios metros que había alrededor suya impidiendo que de esta forma pudiera ver lo que pasaba a su alrededor, tan solo sintio como el tentáculo que estaba en su cintura dejaba de ejercer presión para lanzarse, sin que lo viera, a su cuello. La situación era agobiante, axfisiante y sofocante... No se escuchaba nada, no se oía nada, tan solo los gruñidos de rabia de Sloan que se veía incapaz de hacer nada para evitar lo inevitable. Fue en aquellos momentos cuando, de entre la oscuridad, escuchó la misma malévola voz que decía con cierto aire vejatorio: -Perro malo... Perro malo... Es hora de ponerte una correa... | |
| | | Sloan Lobezno
Cantidad de envíos : 10 Fecha de inscripción : 22/08/2010
| Tema: Re: Buscando el perdón Jue Ago 26, 2010 9:20 pm | |
| El forcejeo por parte de la bestia comenzaba a impulsar poco a poco su rabia, la cual prontamente llegaría a un límite increíble alimentando por consecuencia, la increíble fuerza del Licántropo otorgada por el más poderoso frenesí que este podía alcanzar. El punto límite mencionado y otorgado por su rabia llegó cuando fue tomado por el cuello con aquel tentáculo, cosa que despertó la verdadera bestia que habitaba en su interior y posteriormente haría estremecer al más frío vampiro de su nivel tras aquel rugido de odio emitido a toda voz, justo en el momento que su cuerpo comenzó a actuar a pesar de verse casi inmovilizado.
El Licántropo comenzó a girar su torso hacia la derecha con ayuda de una fuerte cintura, jalando de esta manera y por inercia el tentáculo que lo aprisionaba desde tal sector. Mientras tanto, la extremidad contraria (ósea la siniestra) jalaba hacia la izquierda el tentáculo que se aferraba a ella con gran fuerza, permitiéndole al Licántropo, intentar luego, que al cruzarse ambos brazos, utilizara sus filosas garras para cortar los tentáculos que los aprisionaban.
Luego de esto y de ser totalmente certero, el Licántropo se permitiría elevar ambos brazos hasta la altura de su cuello, intentando cortar de la misma forma en la que se hizo con los miembros que aprisionaban sus brazos, aquel sombrío tentáculo que lo sofocaba poco a poco, cortándole el aire con gran facilidad y haciéndole perder el conocimiento a un lento pero preciso paso. - Debo… derramar… sangreeee… -. Decía la bestia mientras ejecutaba sus movimientos, largando más y más espuma por su boca, denotando claramente que su rabia había llegado a un límite extremo. | |
| | | Narrador Cronista
Cantidad de envíos : 130 Fecha de inscripción : 05/09/2009
| Tema: Re: Buscando el perdón Jue Ago 26, 2010 10:15 pm | |
| - Spoiler:
OFF: Hable con el otro administrador y te pasó, para que haya constancia, los atributos de los tentáculos: Fuerza: Fuerza del pj+ Mitad Sangre del pj Resistencia: Resistencia del pj+Mitad Sangre del pj Velocidad: Velocidad del pj+Mitad Sangre del pj Agilidad: Agilidad del pj+Mitad Sangre del pj Los atributos de los tentáculos en este caso serían: - Fuerza: 6 - Resistencia: 4 - Velocidad: 5 - Agilidad: 5
El licántropo liberó toda su rabia y frenesí contra aquellos tentáculos, había sacado de forma literal la bestia que llevaba en su interior y nada ni nadie podría hacerlo en razón ante aquella furia que había desatado. Usando aquella fuerza animal intentó liberarse de la presa que los tentáculos ejercían sobre él y lentamente lograba que aquellos seres de oscuridad cedieran a sus salvajes deseos. Eras mas fuerte, sin lugar a dudas, pero no lo suficiente como para doblegarlos por completo por lo que se podría decir que le faltaría algo mas de tiempo (OFF: Un post más para liberarte y eso no representa un desgaste, me pillaste de buen humor). Así pues estaba atrapado pero poco a poco lograba llevar a cabo su plan para liberarse y no tardaría mucho en hacerlo si la situación continuaba igual aunque los tentáculos, mientras sucedía esto, ejercían una presión brutal contra su cuerpo impidiendo que Sloan respirara con normalidad o que la sangre llegara a sus extremidades, en se podría decir que aunque no estaba muriendo si se estaba debilitando pues sus huesos no cedían en absoluto ante la fuerza de los tentáculos y por su gran musculatura aun podía respirar pero lentamente se iba cansando. Fue entonces cuando una fría hoja de acero atravesó su pecho, no la había visto venir pues la oscuridad reinante lo impedía y el silencio con el que la figura se movía era absoluto, sobrenatural incluso. La hoja de aquella espada era muy larga y resultaba incapaz de verla por la oscuridad que había pero desde el primer instante en el que atravesó su cuerpo a la altura del pulmón izquierdo notó no era un arma normal, la debilidad acudió ante él y supo que aquella hoja había drenado considerablemente sus energías. Rápidamente aquella hoja fue extraída de su cuerpo sin que se escuchara un solo ruido, realmente cuando Sloan lo pensó se dio cuenta de que no podía oír nada, tan solo su respiración irregular y ello era perturbador... Y con el sentido auditivo completamente "apagado" noto como fría y sangrienta hoja volvía a caer sobre su cuerpo, dando un profundo tajo en su ojo siniestro, cuando dañaba su cuerpo desapareciendo en la oscuridad para que el licántropo no volviera a escuchar nada más. - Spoiler:
OFF: La espada tenía un veneno que reduce tu fuerza, resistencia y velocidad en dos puntos durante cinco turnos.
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| Tema: Re: Buscando el perdón | |
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