Entrenamiento a un usuario. [PRIVADO]

Muchacha, aquí te enseñaré a pelear contra diferentes adversarios; licántropos, humanos, y vampiros.

Antes que nada debes de saber que toda pelea contra otro usuario y también si el narrador así lo quiere contra un personaje no usuario, se basa en interpretación, estadísticas (atributos), espacio tiempo y mucha imaginación.

En este caso lucharás contra "Laurenx"; y estos de aquí son sus atributos:

1. Fuerza: 3.
   
2. Resistencia: 3.
   
3. Velocidad: 3.
   
4. Agilidad: 3.
   
5. Percepción: 3.
   
6. Rabia: 3.
   

Luego y por otro lado, según la forma que obtenga durante la pelea, sus atributos aumentaran de esta manera:
Lobo: +2 de agilidad, +3 de percepción y +3 a la velocidad.
Hombre Lobo: +4 de fuerza, +3 de resistencia, +2 de velocidad y -1 a la agilidad.

¿Todo bien hasta ahora? De ser así, perfecto.
Tus atributos son estos:

1. Fuerza: 1.
   
2. Resistencia: 4.
   
3. Velocidad: 4.
   
4. Agilidad: 4.
   
5. Percepción: 4.
   
6. Rabia: 3.
   
7. Sangre: 2.
   

Está bastante claro que las cosas funcionan de una manera lógica e interpretativa; si tu adversario tiene mayor atributo en fuerza que tu de resistencia, el daño será mayor. Y así, con todo lo demás. Por lo cual, si tu eres más rápida que Laurenx, este no puede hacer un combate como si fuese más rápido que tú, porque sería amonestado.
Con esto claro pasamos página y empezamos de verdad.



Estás en el muelle, es de noche y la luna se siente fría. Tras una de las paredes del pabellón, yace una multitud alocada y en espera de que comience la pelea. Te rodean a ti y a Laurenx, y gritan tu nombre apostado como una posible ganadora. Una lucha callejera, ilegal. Tu entrenamiento está a punto de comenzar.

En aquella noche la luna brillaba con gran esplendor sobre las aguas con el acorde de las luces de las farolas. A simple vista el muelle mostraba su tranquilidad habitual. El crujir de algunas maderas tratadas por lo largo de los años o el frío viento, el sonido envolvente de algunas olas al romper.

En lo mas profundo tras en una de las paredes del pabellón más apartado se encontraba una verja negra, al otro lado se podía ver un par de columnas con una pequeña luz , comenzaba a oírse la voz agitada de algunos individuos, una muchedumbre de personas se encontraba formando un circulo mientras otros permanecían sentados alrededor sobre algunas cajas de madera con su botella de cerveza animando, otros en pie alzado su brazo por encima de sus cabezas con el puño cerrado mientras intentaban que sus voces destacaran del resto. Un foco de luz alumbraba el medio del circulo, en el se encontraban dos sujetos una muchacha de cabellos rojizos en el lateral izquierdo y en el derecho un joven con expresión traquila , era increíble que apenas que tan solo unos segundos se hubieran reunido tantas personas con su griterío moviéndose sin cesar …
Nymphe movió su cabeza con lentitud observando el comportamiento de cada individuo, mordiéndose así ligeramente su labio inferior, no le gustaba ser el centro de atención y mucho menos encontrase en el punto de la mira de sus pequeñas apuestas. Deslizo su mano derecha sobre su cadera a la vez que su cabeza volvía a moverse, esta vez hacia el centro donde se encontraba Laurenx.
Clavando sus verdosos ojos sobre su figura observando de ese modo cual será el primer movimiento …

Laurenx serpenteó hacia Nymphe de manera infraganti, con el apoyo de un bastón donde posa la mano derecha. A pocos metros la levantó para señalarla y dijo - sin armas. Luego se giró para dejar a un lado tanto el bastón como la pistola y la espada. Confiaba en que su enemigo hiciera lo mismo. Ojo, no lo dejó muy lejos, sino al alcance para lo que pudiese ocurrir.

Comenzó a dar varios pasivos saltos, sin pausas, para calentar tanto articulaciones como los músculos. A cada dos saltos adelantaba la pierna derecha y golpeaba un rápido puñetazo al aire, y luego volvía a repetirlo.

El arbitro humano salió de entre la muchedumbre y balbuceó con tono alto: ¡Las apuestas están hechas! Entró en el eje del circulo y levantó las manos mientras asentaba la cabeza mirando primero a Laurenx y luego a Nymphe ¡Qué empiece la pelea! y bajó las manos indicando el comienzo.

Laurenx volvió a adelantar la pierna, y esta vez la izquierda. Avanzó de esa manera hacia la vampiresa mientras su cintura parecía bailar con minúsculos movimientos laterales para distraer al enemigo. Su brazo izquierdo se posiciona por delante, y el derecho más atrás; ambas a la altura de la cara.

[Pelearemos cuerpo a cuerpo primero, sin armas.]

Laurenx traza con suma rapidez un puñetazo no tan potente hacia la cara de Nymphe; ojo, con la mano izquierda que acompaña al pie del mismo costado (eso hace que el alcance sea más largo al poder estirar aun más el brazo). Fue un golpe para distraer al enemigo, y sobre todo para avisarle de lo que luego le vendría. Su puño derecho tapona y cubre su mandíbula durante el transcurso del movimiento.

Laurenx recogió el puñetazo con picardía al mismo tiempo que Nymphe le golpeaba el costado, pero durante esa misma trayectoria fue entonces cuando el licántropo con la inercia del apoyo de su pie izquierdo adelantado y derecho atrasado, torció levemente la cadera y estiró desde atrás con una potencia máxima con su puño derecho el brazo para, encestarle un severo golpe al mentón de la vampiresa. Sin compasión.

El puñetazo de Nymphe a penas fue una cosquilla para él, pues sus músculos y su resistencia física le habían hecho sentirlo casi como un golpe mal dado.

Su rival era rápida, pero no había tanta diferencia en ello. La patada atravesó sus defensas e impactó sobre su abdomen lateral, una pared dura y resistente, pero aun así, lastimada por la ferocidad de la patada. Esta ves no se dedicaría a ofensar, sino a hacer jiu jitsu.

Cerró como un gatillo el brazo del mismo lado golpeado, y atrapó la pierna de Nymphe antes de que pudiera retirarla. Se medio arrodilló, y luego con el mismo eje de movimiento e impulso rotó hacia la derecha mientras, tiraba con la fuerza y ayuda de su cuerpo contra la pierna de la muchacha, para así, tirarla al suelo y atraparla en la desconcentración para zumbarle una patada en la cara desde su elevada posición. Una patada al puro estilo pisotón.

El punto débil de Laurenx, el menisco. Retrocedió con un fuerte dolor que le había dado cuajadas hincando dientes para fortalecerse. En ese tiempo su rival se levantó y como era de esperar, recuperó su posición.

No estaba nada mal, pero era hora de poner a prueba la segunda rama de un licántropo contra un vampiro.

Aulló, y su alarido se convirtió en un grito de dolor cuando sus huesos comenzaron a quebrantarse con sonidos metálicos y a deformarse hasta que sus brazos y sus piernas fuesen patas. Lo que antes era un humano, ahora era una mata de pelos, con grandes colmillos y de una altura considerable que podía llegar tranquilamente al pecho de Nymphe. Un lobo, simple como se ve, pero peligroso como ninguno.

Mostró sus dientes y rugió como amenaza.


[Ahora mis atributos aumentan, en forma lobuna. Leer arriba para más información. Ahora puedes usar tus poderes, senderos, habilidades, o como quieras llamarlo de los vampiros.]

El lobo no respondió, pues su lenguaje ahora era muy diferente al de ella. Comenzó a dar paseos en círculos alrededor de la vampiresa, estudiando toda posibilidad animal de hincarle el diente y destrozarla. El azul de sus ojos reflejaba la viva imagen de la muchacha, y sus colmillos representaban la muerte. Abriendo la boca aulló de furia y luego se abalanzó contra su presa de un magnifico salto que buscaba caerle encima y degollarle la cabeza con su grande y fuerte mandíbula.