Trágico y revelante.

Carlos, siguiendo de manera audaz el rastro de Laurent tal y como era reconocido en la raza Sköll, llego a un lugar lleno de sangre, tan lleno, que dañaba la vista y superaba el aguante de cualquiera; una escena repulsiva, llena de cadaveres desangrados con marcas de colmillos en el cuello. "Vampiros..." penso Carlos al ver esa imagen, ahora sabía lo que esos seres eran capaces de hacer y hasta que punto eran capaces de llegar.

Mientras observaba la escena, vió a su compañero de la cueva con sus heridas sanadas casi por completo, arrodillado en el suelo, sujetando la cabeza de otro licantropo en su forma humana sobre sus rodillas, mirandolo de forma pensativa. Carlos se movio de forma sigilosa, sin hacer ni el más minimo ruido, detras de un arbusto, donde se transformo en humano y procedió a vestirse, ya que en su forma humana su resistencia al frío disminuía debido a la falta de grasas. Una vez estubo vestido salio de los matorrales de un salto y cayo justo detras de su compañero, a lo que dijo:

- Es duro perder a tu familia... Seguro que era un buen hombre, supongo que amigo tuyo, ¿no? (Se hizo el silencio durante unos segundos) No te preocupes, encontraremos a los que hicieron esto y les haremos pagar por sus pecados, después le daremos un entierro digno a todos, para que algun día sus espíritus nos acompañen y para que tambien acompañen al Dios Sköll en su eterna cacería...

Carlos al observar los cuerpos inertes de los licantropos descubrió que el olor se repetía por todos lados, por lo que dedujo que todos eran seguidores de Sköll, y eso le causó mucha pena, tambien sembró en él el deber de eliminar a los que atacaron asu raza, por el simple echo de vengar y honorar a aquellos cuerpos que hicieron todo lo posible por defender su existencia. Era una promesa, no descansaría hasta encontrar y eliminar a los causantes de tal sangrienta y vampiricamente deshonrosa batalla. Esto no iva a quedar asi...

Krom había seguido a su nuevo compañero, Laurent, por los bosques que parecía conocer mejor que el mismo. Sin lugar a dudas su manada debía tener su refugio por aquel lugar y por la seguridad que tenía estaba claro que recordaba con claridad donde había tenido lugar el combate. No había pasado ni una hora desde que partieron de las minas cuando, en el ambiente, noto los olores de la muerte y la putrefacción clásicas de uno o de varios cadáveres...

Pasados unos veinte minutos después de notar los primeros rastros de muerte encontró, en la lejanía, el primer cadáver que pertenecía a un licántropo de mediana edad... Mucho más curtido en las batallas que el propio Krom y seguramente, por ello, mas poderoso que este. Una lamentable perdida pero que se amplificó pasados unos minutos al encontrar el lobo blanco montones de cadáveres correspondientes a vampiros y hombres lobo.

El número de licántropos vencidos superaba ampliamente al de los vampiros, por el mero hecho de que estos primeros cayeron en una trampa, y encontró a Laurent arrodillado ante, el que parecía, un gran amigo suyo...

Antes de que se hubiera dado cuenta se encontraba en mitad de aquella masacre, había un carruaje destrozado e inservible tirado en mitad del lugar, y los restos de los viejos inmortales estaban esparcidos en mitad del lugar... Sus restos, en muchos casos, estaban despedazados de forma que sus órganos vitales estaban desparramados por mitad del bosque sembrando un horroroso cuadro de terror difícil de soportar para el que no estuviera acostumbrado. La sangre había sido esparcida como si de agua derrochada se tratara y era difícil encontrar un lugar donde esta no estuviera visible...

En los ojos de muchos de los muertos aun podían verse las miradas de terror que tenían antes de la propia muerte... No había palabras para describir aquello, no había nada honorable u épico digno de cantares de gloria... Tan solo había sido una masacre que harían bien en vengar y olvidar cuanto antes, si podían.

No dijo nada, no cambio de forma pues sus sentidos estaban mas desarrollados en aquella forma y consideraba que alguien debía estar atento a todo lo que pudiera suceder y tampoco tenía nada que decir pues aquella imagen de muerte lo dejó sin palabras. Tan solo se acercó a Laurent para agachar la cabeza ante el muerto que contemplaba como signo de respeto mientras percibía la presencia de Carlos que había llegado ya al lugar siguiendo su rastro.

La batalla se había perdido dejando a cambio solo sangre y cadáveres, pero la guerra no ha hecho más que comenzar. Laurent Hellsing estaba realmente apenado, su corazón se encogió durante una fracción de ira ante el desfigurado rostro de su mejor amigo Cid. Lo dejó en el suelo y se volvió a levantar, desnudo como su madre le trajo al mundo. Se acarició el mentón y limpió una lágrima de frustración. Al cabo de los segundos había asentido con la cabeza a las palabras de Carlos, y sin decir nada se acercó al cuerpo inerte del vampiro rastreador y lo examinó. Efectivamente, había un tatuaje en su brazo y otro en el delgado y pálido cuello.

- Como suponía, hay un tatuaje en este ser conmovedor - dijo mientras caminaba hacia otro vampiro fallecido - y este también lo tiene en el mismo brazo. - Se puso de cuclillas y extrajo de la misma mano fría y déspota del vampiro una daga que ni había probado sangre en toda la noche para, luego, arrebatársela y cortar como la mantequilla la piel que simbolizaba el tatuaje. Una vez arrancado de su lugar, se volvió a los licántropos y lo estiró para que estos lo vieran.

Carlos estuvo presente mientras el desnudo Laurent les enseñaba un tatuaje, parecia de una congregacion o "Aquelarre" como ellos querian llamarlo. Pensativo durante unos segundos, dandle vueltas a su cabeza llena de conocimientos sobre trampas,cacerías y emboscadas, se le ocurrieron varias hipótesis, todas posibles, pero necesitava un poco de información para ir descartando asi que dijo:

- Sé que esto es duro para tí, pero tengo unas preguntas... ¿Me puedes explicar que pretendiais hacer con este grupo? ¿llevaban algo de valor? ¿como os sorprendieron? ¿os hicieron una emboscada o simplemente defendieron el carruaje?

Dijo Carlos al ver dos huella completamente paralelas marcadas en la nieve que se perdía en la estepa y los matorrales. Carlos pensaba que si tenía algo valioso dentro deberia ser un arma anti-vampírica de la que querian deshacerse a toda costa o un cargamento de oro para los planes del Aquelarre. Pero si había sido una emboscada se le ocurrian varias ideas, pero tenia que esperar respuestas de su compañero licántropo, solo él tenia la respuesta...

El lobo blanco se sentó sobre sus patas traseras y observó con detenimiento todo lo que realizaba Laurent, no se sorprendió cuando este les mostró una piel con un tatuaje gravado y podría decirse que cierta sonrisa maquiavelista apareció en los labios de Krom. No parecía estar cansado pero aquel lugar lo perturbaba, no quería permanecer en ese campo sembrado de cadáveres durante más tiempo del necesario, y por ello podría vérselo algo inquieto.

Pero esa inquietud no nacería de la inseguridad sino de la lógica, posiblemente aquellos que marcharon volverían para terminar el trabajo que los otros empezaron y unos simples lobeznos no podrían hacer nada contra un aquelarre bien organizado, aunque cabía la posibilidad de que no volvieran pero el mero hecho de estar rodeado de montones de muertos de su raza resultaba sumamente desalentador.

Mirando ahora el tatuaje que Laurent había arrancado con aquel cuchillo tomado del vampiro muerto cierto aire pensativo podría verse en la mirada del lobo, el cual no decía nada porque no quería ni podía pues sus cuerdas vocales no eran ahora mismo como las de los humanos y por ello tan solo podría gruñir y con suerte ladrar para transmitir sus pensamientos, y sin lugar a dudas esperaba a que Laurent, mayor conocedor de lo sucedido, les explicara a todos que había sucedido y que debían hacer para vengar a los suyos pues el, en ese momento, era un completo ignorante y mejor callar que hablar para errar.

Lo mayor que hacía en aquel momento era permanecer alerta, con sus sentidos agudizados, a la espera de encontrar alguien o a algo que quisiera sorprenderles.

- Está bien...
Laurent aun dolido de una herida que ya parecía estar curando, trincó dientes antes de empezar a hablar. La inquietud del lobo le ponía aun más nervioso, pero con seguridad bajó la mano y con ello el tatuaje y empezó a revelar lo ocurrido. Tardó varios minutos en hacerlo, mientras que eran sus manos quienes discutían acorde con gestos al ritmo de sus palabras.

- Hasta donde fui informado, este grupo de vampiros se dirigía hacia la ciudad. En el carruaje debía de encontrarse un científico, humano que según uno de nuestros espías comentó ser una amenaza contra los licántropos. Tratamos de interceptarlos para sonsacarle que tramaban los vampiros. Yo esperaba la orden del jefe de la manada, pero no pude resistirme a escuchar lo que estos hablaban mientras cruzaban la frontera. Algo sobre la extinción humana, que aunque me pareció una locura pues estos se alimentan de sangre, me acerqué a escucharlos mejor hasta que uno de ellos me sorprendió y me capturó como rehén. Durante el apaleo pude observar sus tatuajes. Era una tapadera. No habían científicos, solo un carruaje vacío. Creo que deberíamos de averiguar que es este - alzó el tatuaje de nuevo - tatuaje.

Carlos pensativo al oir las palabras del joven Laurent, descartó la posibilidad de defensa propia de los vampiros, y solo quedaron dos opciones, las cuales expuso a sus compañeros:

- No se de qué es ese tatuaje, al parecer todos era de un mismo Aquelarre y esta supongo que sería su marca de identificación. Lo que me discurre por la cabeza son dos posibilidades, las expongo desde un punto de vista lógico para ustedes sin afan de acusar a nadie.

1. La posibilidad de que el informador de el grupo licantropo fuese descubierto por la zona y los vampiros aparentaran dar una informacion real para que los demas licantropos cayeran en la trampa y asi poder aniquilar a la manada.

2. Teníais un topo en la manada, el cual trabajaba para los vampiros.Que este os dieran una informacion falsa y cayerais en la trampa, que el topo fingiera ser atrapado o matado y en realidad lo que hizo fue huir de la escena.

Sinceramente me decaigo mas por la segunda ya que viniendo de la raza Sköll es muy dificil pillar un espía debido a su capacidad de escondite y caza silenciosa, aunque todos hemos tenido un mal paso. Pero mi idea sería la segunda, deberíamos seguir el rastro de las huellas y ver hasta donde nos llevan para encontrar a los responsabels para sustraer informacion.

Una vez Carlos expuso sus teorías para el resto del grupo, espero respuesta de que era lo que los demas pensaban. La segunda opción para él era la mas acertada pero debía escuchar la opinion de sus compañeros para elegir una estrategia de seguimiento...

El pelaje del lobo comenzó a caer justo cuando Carlos terminó de decir sus palabras, su cuerpo se contorsionó y comenzó a cambiar de forma haciendo que sus huesos se rompieran para volver a formarse y que sus músculos se desgarraran para volver a crearse con nuevas formas. Su columna se rompió con un sonoro y molesto crujido y su hocico se aplanó al tiempo en que sus ojos tornaban a un marrón muy claro.

El desnudo humano miró a los presentes y dirigiendo una mirada hacia Carlos respondió a sus palabras diciendo:

-Carlos creo que hay muchas más posibilidades, si detrás de estos vampiro hay un antiguo muy poderoso con sus capacidades podría haber detectado a la manada por ejemplo sin necesidad de que hubiera traidores o informaciones erróneas y usar esto como un mero señuelo. Yo creo que más que preguntarnos como se dejo el anzuelo para que los peces picaran deberíamos preguntarnos por que el pescador dejó el cebo. - dijo para seguir observando el lugar que le inquietaba, no le gustaba estar en aquel sitio pues dudaba que fuera a estar tan tranquilo durante mucho tiempo y no sabría explicar por que pensaba eso pues tan solo era un mero y básico instinto de supervivencia.

El no creía que los licántropos hubieran traicionado a los suyos, pensaba que había algo tras todo esto y que este manada tan solo había sido conducida a su propia exterminación pero bueno, era tan solo una opinión y no tenía pruebas para justificarlo, pero de lo que si estaba seguro era que tenían que encontrar los motivos por los que todo esto había sucedido.

Ahora se movía constantemente alrededor del lugar, mientras movía sus brazos, pues en esa forma le costaba aguantar el frío sin ropa y moviéndose evitaba que su cuerpo cayera presa de aquella helada... Había que moverse y marchar de aquel lugar.

- Está bien, yo al igual que ustedes no tengo ni la más mera idea de lo que está ocurriendo.
La noche ya estaba terminando y el frío helaba sus pulmones, le escocía la herida y le dolía las articulaciones del cuerpo entero. Un dolor exagerado punzaba las sienes, pero aun así luchaba por aguantarlo todo y sobrevivir a la noche en su forma humana. Pero debían de marcharse ya, no aguantaría más. Se guardó el tatuaje arrancado de las mismísimas extrañas del vampiro y se llevó la congelada mano al hombro que tanto le dolía hace horas. Inhaló el aroma del fallecido después de haberse postrado en su cercanía, y balbuceó con un tono molesto - No tardarán en desvanecerse en su putrefacción. Será difícil seguirles el ritmo a los que sobrevivieron... - tragó saliva y tartamudeó entre rechinantes dientes antes de continuar - ... lo mejor será refugiarnos y allí elaborar algún plan.

Laurent Hellsing ya contaba con la ayuda de los suyos para resolver el enigma y vengar a los licántropos de su clan. Miró a Carlos y luego a Krom por encima de su hombro, y no tardó en regresar a su forma lobuna con quebrantos de huesos y una orquesta crujiente después de dirigirle una palabra al que, parecía, a simple vista, el jefe de una nueva e imaginaria manada.
- Te seguiremos.

Off:

Había escuchado algunos rumores de percances en los bosques cercanos relacionados con lobos, eso ciertamente era una pista por donde comenzar a buscar y aunque fueran solo rumores era algo con que empezar aunque solo fueran realmente lobos, simples animales salvajes y no los lobos como él.

Decidió entonces investigar dichos rumores por lo que sin perder tiempo alguno se dirigió al área en donde habían sido vistos aquellos animales de aspecto y comportamiento salvaje.

-Espero encontrar algo mas que simples lobos normales...- Comentaba para el mismo mientras caminaba entre la nieve y los arboles cubierta por esta, su vista era dirigida hacia todos lados intentando encontrar algún indicio de ellos.

Una vez Krom volvió a su estado humano y dijo su opinión, pensó que sería buena idea volver a la cuva ya que tenia pendiente inspeccionar la zona, cosa que hizo durnte la persecución a sus compañeros, ya tenia una zona menos que inspeccionar, solo le quedaba la zona oeste. Al ver que Houck no venia pensó que deberia haberse quedado investigando las zonas asignadas mientras los demás seguiamos a Laurent. Carlos se transformó en lobo mediante un fuerte aullido y una sinfonía de crujidos y estallidos oseos, donde su pelaje se volvía de un color oscuro y le cubría el cuerpo entero menos su cicatriz en el ojo izquierdo. Una vez completada la transformación, Carlos pronunció unas palabras:

- Compañeros, coged camino hacia la cueva, que ya os alcanzaré, aún tengo que inspeccionar la zona oeste de la cueva para asegurar el perímetro. Descansad y por la mañanas hablaremos una estrategia de busqueda y captura. Nos veremos al amanecer...

Una vez terminado su charla solto un aullido hacia los cielos y comenzo su carrera con su mochila a cuestas en pos de inspeccionar el perímetro, no fuese a pasar que se encontrara con algún vecino inesperado...

Krom observó como Carlos se transformaba para, posteriormente, decir que volvía a las cuevas a investigar y a asegurar la zona, después de que Laurent se transformara y dijera que había que marchar del lugar para elaborar un plan... El rastro de los vampiros era débil y se perdería pasadas unas horas aunque era de locos, y no de valientes, ir tras este con tan solo tres efectivos y con varios compañeros perdidos a lo largo y ancho del bosque. No, sin lugar a dudas la opción de ir tras los vampiros ahora no era factible en sus condiciones:

-Vive hoy y lucha mañana- pensó el licántropo tras meditar que de la noche a la mañana se había convertido en una especie de jefe o alfa de una manada de lobeznos, algo que sin lugar a dudas no deseaba pues le gustaba la soledad y aunque pudiera llegar a desear la compañía de los suyos nunca sería esta desde la superioridad sino desde la igualdad o incluso inferioridad si había alguien más poderoso que él pues consideraba que no era digno de dirigir los destinos de aquellos hombres lobo...

Trasformándose en el lobo blanco que era con unos crujidos de huesos y desgarros de músculos bastante dolorosos se alzó en todo su esplendor, mirando a los presentes y hablando en la simple lengua de los lobos:

-Somos pocos y jóvenes, ir ahora tas los vampiros es una locura, pero tampoco debemos perder su rastro... Si no las muertes de los tuyos serán en vano- dijo mirando a Laurent- Viviremos hoy y lucharemos mañana pero iremos tras el rastro de los vampiros y nos ocultaremos en algún lugar en los lindes del bosque. La distancia y la cercanía del amanecer serán nuestros aliados.

Tras decir esto miró de reojo a Carlos y le dijo antes que marchara:

-Yo no soy vuestro padre, si quieres ir a las cuevas hazlo pero allí no hay nadie y por ende nada que defender... Asegurar esa zona es algo que por ahora carece de sentido si no vamos a volver hasta resolver este misterio... Puedes ir y comprobar la zona pero posiblemente dentro de unas noche vaya alguien y tu trabajo, por ende, sea en vano. Nosotros iremos tras el rastro de los vampiros, eres ducho en ese arte así que no te será complicado seguir nuestro rastro... Cuando encontremos una pista que seguir nos ocultaremos en algún refugio pues no buscamos luchar.

Tras decir esto comenzó a correr por los bosques hacia donde sus sentidos de licántropo le guiaban, el olor cadavérico de los vampiros era fácil de reconocer y no tardo en encontrar un rastro que lo llevaba de forma directa hacia la ciudad... No irían al mismo refugio de ese aquelarre pero si buscarían alguna pista antes de que ese rastro se perdiera.

El no era el líder... Al menos no se veía como tal y si lo era tampoco respetaban sus edictos, que cada cual hiciera lo que quisiera pues él ayudaría a Laurent a vengar a los suyos.

Spoiler:

Carlos frenó su carrera al oir las palabras de Krom, si cierto era que no ivan a volver a la cueva hasta dentro de unos dias de nada serviría su trabajo, así que tomó la opción de seguir a sus compañeros, por propia voluntad, no como una orden, ya que Carlos sabía que en la manada no había lider, pero sí habia una cabeza fría y pensativa que daba opiniones que los demas veían correctas, y por lo tanto, las seguían.

- Bueno... tienes razon Krom sería para nada irme ahora a la cueva, así que os ayudaré en la busqueda ya que mis sentidos en este bosque han aumentado considerablemente, os guiaré por el rastro hasta donde pueda. Y tranquilo, yo no te ocnsidero un lider, eres mas bien... un tio con cabeza jajajaja Vamonos pues.

Carlos cambió de sentido y empezo a rastrear e olor a putrefaccion que dejaban los chupasangre, el rastro era débil pero podía seguirlo. Algo en su cabeza le dio un dato que compartió con sus camaradas durante la carreta:

- El rastro es muy débi, pero puedo seguirlo. Tened cuidado, son mas de 10 vampiros y arrastran un carruaje que puede pesar cerca de 200 kilos tirados por 2 caballos, el peso me dice que dentro van mas, no sabrñia decirte cuantos, pero me temo, que han sobrevivido bastantes. Habra que tener cuidado...

Laurent Hellsing no dijo nada. Además, la herida no se lo permitía... no estaba escuchando del todo a los presentes. Se agazapó como un león antes de actuar contra su despistada presa y se abalanzó hacia delante con un aullido revelante. Así se perdió entre los matorrales y corrió tras los demás.

Trágico y revelante. El encuentro de todos los licántropos no había sido una casualidad, algo los había unido pues un mal mayor actúa desde las sombras y pone en peligro la raza humana y la de los suyos.

El joven lobo volvió a aullar para ser escuchado en todo el bosque. Las huellas, los rastros, el olor, todo había desaparecido, pero la sangre derramada y congelada en varios puntos del bosque los dirigían hacia la ciudad. Interceptar al resto de vampiros ya era una tarea imposible.

Su búsqueda parecía algo dura ya que los rastros eran casi imposibles de ver y mas aun de seguir ya que la nieve imparable ocultaba todo rastro de huellas y olor de cualquier tipo pero un aullido repentino hizo que detuviera su andar por un momento levantando la vista en dirección del sonido.

-Un aullido y no es de un lobo norma...- Comento para si mismo reanudando su caminata ahora dirigiendo sus pasos hacia aquella dirección

-Al parecer voy en la dirección correcta solo espero que no sea una falsa alarma- Comento nuevamente para el mientras su mirar buscaba cualquier indicio de lo que esperaba encontrar.

Repentinamente el humo de lo que podría ser una fogata podía asomarse entre los arboles por lo que sin pensarlo dos veces dirigió sus pasos hacia aquel sitio encontrándose en una cueva en la que al parecer había estado alguien ya que las brasas de la fogata aun estaban encendidas.

-Parece que estuvo alguien aquí y no fue hace mucho tiempo...- Comento mientras observaba las brasas y algunas huellas que aun estaban ahí ademas del olor a carne cruda. -Creo que voy en el camino correcto...- Comento una vez mas para entonces virar su atención hacia la salida de la cueva encontrándose con algunos arboles rasgados y rastros de sangre que se dirigían hacia la espesura del bosque.

-Al parecer hubo un enfrentamiento...- Salia de la cueva dirigiéndose hacia las marcas de rasguños para observarlas mas de cerca. *Tal vez ya estén muertos...* Pasaba por su mente mientras su mirar se posaba hacia la dirección en donde parecía dirigirse el rastro de sangre sobre la nieve. Sin hacer mas espera comenzó a caminar en aquella dirección esperando encontrar a alguien vivo.