El reencuentro

Tarde... pero llegó.

Óptimo rememoro aquel día, cinco años atras, cuando habia pactado con aquel, su primera progenie, un vago y poco probable reencuentro. ¿Se daría?

Óptimo habia recibido ordenes de volver a la corte rusa y por ende abandonar la responsabilidad de adiestrar a su vastago (Aparte de los pocos meses que efectivamente paso con él explicandole su nueva naturaleza) más aquel pacto (Que Óptimo jamás creyo se concretaria) de reencontrarse en el día de la fecha, cinco años exactos despues de su abrazo, en aquella ciudad rusa era una suerte de catalizador de la posible culpa y responsabilidad del sire.

Óptimo se comunico con aquel mediante su movil y sorprendentemente aquel respondio, reafirmando el pronto encuentro. Pactaron una hora (Que Matt cumplio y Optimo no) y el destino comenzo a mover los engranajes de aquella situación.

Óptimo llego un par de horas tarde... asuntos de la corte que lo habian retenido contra su voluntad. Igual, tampoco se preocupaba demasiado, era demasiado viejo como para alterarse por su falta de puntualidad... serviria como una lección de paciencia para Matt.
La inmovil situación del callejon se altero cuando una sombra se consolido en su boca, sombra que dejo paso a una figura que andaba hacia alli con paso lento pero agil; Una figura alta (Dos metros de altura), de aristocratico porte y semblante sereno, tez palida aún para un vampiro y su incambiante cabellera rubia peinada hacia atras.

Él se adentro en el callejon y pronto percibio el aura del vastago... efectivamente, seguia vivo... todo lo vivo que se puede estar claro.


- Bienvenido a Rusia, Señor Bellamy. - Fue todo cuanto dijo para detenerse (luego de haber avanzado unos dies pasos hacia dentro del callejón.

Óptimo cerro los ojos con indiferencia, restandole importancia al asunto de su llegada tarde... cuando Matt tuviera su edad (Aunque era poco probable que jamás llegara a ser tan viejo... no naciendo en este mundo actual) entendería lo irrelevante de una tardanza de dos horas... la duración de un pestaneo.

- Cinco años despidiendote y atando los cabos de tu vida... - "patetico" penso pero no pronuncio - A mi me tomo una noche de sexo con una esclava... - dijo recordando, como si hubiera sido la noche anterior, aquella larga noche, más de mil quinientos años atras. La memoria de Óptimo era, por no existir mejor termino, perfecta.

- Depende de tí, y de nadíe más, empezar un capitulo para arrepentirte o ennorgullecerte de tu nueva naturaleza... yo podré guiarte, pero no llevo ni llevaré las riendas de tu no vida... - Explico con claridad. Podia ayudarle y se encargaria de que no se metiera en demasiados problemas (Por el bien de Óptimo mismo) más quedaba claro que no estaba para hacer de niñero o tutor sentimental.

Óptimo llevo una de sus esqueleticas manos a la nuca para pasarsela sobre esta acomodando los cabellos (Que mantenian su perfecta sincronia) en un gesto adquirido por la simple costumbre, mientras escuchaba.

Luego dijo, una vez aquel le "ordeno" - Agradescas, o condenes, a quien te abrazo, no deberia ser yo el autentico destino de tus cavilaciones... Pues aunque sí, te convertí y eres, por ahora, mi responsabilidad, fui encomendado a hacerlo por otro, por uno que desea conocerte esta noche... Creo seria un buen "siguiente paso" - Aquello no era del todo cierto, no le habian mandado, expresamente, que le convirtiera, pero Óptimo lo habia juzgado necesario para poder seguir cumpliendo con sus ordenes.

Asintió, avanzando hasta que su hombro diestro rozara el poliester del traje del hombro siniestro de Óptimo.

- De acuerdo - Dando un par de pasos al frente, colocándose tras el vástago y posando sus ojos en la dirección contraria.

En un rápido, efímero y casi imperceptible gesto, el puño derecho cerrado de Matt se dirigía, tras un giro sobre sí mismo, a la cabeza de su progenitor. - ¡Todavía no te he dado las gracias! - Exhalaba con euforia.

(Off Rol):
Celeridad nivel 2.

(Off Rol): Supongo que querrás decir Celeridad nivel 1.

Fue imposible detener el golpe. Primero, porque Óptimo no lo esperaba. Aunque era cauto y procuraba siempre mantener sus sentidos alertas (Gajes del oficio de espía) él no esperaba una reacción hostil por parte de su oponente. Segundo, porque estaban de espaldas, y jamás hubiera adivinado que aquel otro, su "descendencia" fuera capaz de realizar un movimiento tan traicionero y cobarde como el de atacarle por la espalda. Tercero porque la velocidad de Matt excedia aquella de Óptimo significativamente (Vel. 5 vs 2).

Y entonces Óptimo recibio aquellos nudillos en el maxilar, un puñetazo que no era demasiado fuerte más que le movio el esqueleto por la sorpresa mientras lo recibia y una mueca de violencia se dibujaba en su rostro conforme su cuerpo se arqueaba hacia abajo.

Óptimo escupio sangre y reacciono con agilidad mientras ataba cabos de lo sucedido y por propio instinto automatizado dirigia un propio golpe; Un gancho vertical que nacía escondido de la vista de su oponente y que solo cuando Óptimo se irguiera aquel lo vería, ojala demasiado tarde, que se dirigia a su propio rostro, a la base de sus maxilares.

¿Tenia que darle una lección antes de llevarlo a su cita? De acuerdo.

(Off Rol): Mira mejor; nivel 2.

Recibió el golpe, irguiendo su barbilla y observando la plenitud del oscuro manto nocturno. Estaba claro que para un músico, las artes de la lucha eran un secreto velado a sus oidos, por lo que tampoco podía presentar demasiada dificultad a su combatiente... A fin de cuentas, éste era experto en su oficio.

Sonrió e inclinó sus rodillas para acometer cual jugador de rugby o futbol americano, con la misma velocidad antes mostrada.

Era denotar sus pobres habilidades para la lucha.

(Off Rol): Mira mejor; nivel 1.

Pero Óptimo estaba atento, y la confusión del golpe que habia recibido se esfumaba tan rapido como su mente maquinaba las tantas opciones que tenia para luchar.

Él observo a su oponente lanzarse al ataque y, como mejor reacción encontro solo el dejarse hacer;

Su oponente avanzaba ahora rapido, pero no con la sobrenatural velocidad antes mostrada (Ya gastaste tu punto de sangre de celeridad en el post anterior), por lo que mientras Óptimo era impactado este camino rapido y de espaldas siguiendo el curso que Matt guiaba para arrastrarse ambos, uno empujando y el otro dejandose empujar, hacia la pared del callejón.

En el instante en que Óptimo sintiera la pared a sus espaldas, se detuvo en seco, haciendo fuerza para neutralizar el impulso de Matt y lanzar una rodilla hacia el estomago del enemigo que le tenia atrapado, para con ello liberarse y desequilibriar a su oponente; Y entonces, en un instante, o mejor de un instante a otro, cuando se hubo encontrado libre de las ataduras de un oponente que, se supone, estaba en ese instante descolocado por el rodillazo, Óptimo desaparecio.

El manto de la noche, acentuado en aquel callejón especialmente oscuro y junto a esa oscura pared, las sombras confluian macabras y, entre ellas, totalmente invisible a la vista de Matt, permanecia inmovil, a escasos metros de distancia, Óptimo. Listo para contraatacar contra el que, suponia él, seria un confundido oponente.

Su mano descansaba sobre la anciana espada que tenia atada a la cintura, más no habia desenfundado... sabia que el vastago queria quemar energias, por eso la pelea... no le mataría y, por él, la cosa no evolucionaría a intercambio de aceros.


(Off Rol): 1 Punto de Sangre en Ofuscación.

Recibió el nuevo golpe, quedando algo aturdido y llevando sus dos extremidades superiores a la zona del impacto mientras que escupía esputos sanguiolentos.

Sonrió, reincorporándose y tambaleándo ligeramente.
- Soy tu responsabilidad... ¿No? - Soltando una carcajada tras la última palabra.

Sus musculos volvieron a moverse a aquella sobrehumana velocidad, pero esta vez no para arremeter contra su enemigo.

Simplemente montó sobre su motocicleta y llevó sus finos dedos a la llave de contacto, con intención de abandonar el lugar e incitando con un último - I'm your unnatural selection, Óptimo! Catch me! - a que lo persiguiera.

La invisibilidad se desvanecio. Junto a aquella moto, junto a aquella unica vía de escape a la que Matt podia recurrir, se habia mantenido en aquellos momentos, inmovil y expectante, Óptimo.

Alli donde antes habia una sombra ahora habia un vampiro. Alli donde antes habia una llave ahora no habia nada: Él primer movimiento de Óptimo habia sido retirar la llave de la motocicleta, cortando la retirada de Matt.

La diestra de Óptimo atrapo la mano extendida de Matt mientras su siniestra lanzaba un puñetazo al pleno rostro, sin soltarle, del joven vastago, con la clara intención de hacerle bajar de su montura metalica.

- "Done" - Respondio, con macabro sentido del humor, Óptimo a la orden de Matt dando, por su parte, por terminado aquel macabro juego que sino escalaría a aceros y colmillos...

Salió despedido de la motocicleta, impactando contra la pared vecina.
Magullado y apalizado, totalmente deplorable. Sentaba, con las piernas extendidas y los ojos mirando firmemente la plenitud del suelo que pisaba.

- Pfff... - Dijo entre tosidos - No puedo ir a ningún sitio en estas condiciones.

Levantó la mirada, observando ahora a quien acababa de propinarle aquel puñetazo.

Y sin esperar aquella reacción por parte del músico... - Enseñame a luchar - Exhaló repentinamente

Óptimo suspiro mientras su mano se abria y cerraba buscando mitigar las consecuencias del impacto del rostro de Matt en sus nudillos.

Felizmente el duelo habia acabado, aunque la solicitud, con un tono más adecuado que las anteriores ordenes del vastago al sire, era demasiado amplia como para agradar a Óptimo. "Luchar", un termino tan amplio que no cabe toda una vida, ni una docena de vidas (como era su caso) para abarcarlo. Tantos estilos de lucha, tantas alternativas y tantos requisitos que era resultaba imposible "Enseñar a luchar" al completo. Más Óptimo, acostumbrado a estas contradicciones, saco cuanto quiso de la solicitud y, resignado, acepto. Le enseñaría solo lo basico y fundamental de lucha callejera... nada de la tediosa teoria del Karate o la pomposa caballerosidad del boxeo, lucha callejera, lucha de supervivencia... lucha cuyo unico fin, y unica regla, es vencer al otro y cuyo medio para hacerlo lo involucra todo.

Óptimo rebusco en un bolsillo y extrajo un anciano y elegante reloj de bolsillo y comprobo que todavia tenian tiempo para su encuentro con el tercero en cuestión... suficiente para una primera clase.

- Bien. Veamos... - volvio a suspirar mientras se acercaba a su interlocutor y le tendía una mano para ayudarle a levantarse - Te enseñaré algunos trucos utiles... pero el verdadero arte de luchar esta en los impulsos de supervivencia que nos obligan a infringir daño inconcientemente... - dijo mientras esperaba que aceptara su invitación.

Incoporándose gracias a la ayuda de su Sire, Matt dirigió una furtiva mirada a este.

- Soy todo oidos - Exclamó mientras que bajaba sus puños y, por consecuente, la guardia.

- Por cierto, ¿que edad tienes realmente? - Tal vez era demasiado pronto como para realizar esa pregunta, pensó tras pronunciarla - Tus gestos, tu forma de hablar.. - Suspiró - Pareces de otra época.

Óptimo sonrio ante la pregunta. No tenia respuesta. Óptimo no parecia de otra epoca, era de otra epoca, de hecho, de varias otras. Ya no pertenecia a una sola, ya no era un hombre contemporaneo y ya no era aquel principe godo, era ambos y más, era otros tantos que habia sido en el correr de su larga no-vida.

- Solo digamos que tengo varias "epocas" a mis espaldas... - acoto.

- Bueno... - agrego separandose un metro del otro - En guardia. - zanjo mientras él mismo se ponia en guardia, magullado como estaba, Matt habia pedido entrenamiento y Óptimo no era dado a la simpatia de dejarle descansar ni un instante.

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Tres horas despues Óptimo libero las muñecas de su rival (Que tenia apresadas por sus manos) y se aparto para resoplar - Bueno, es suficiente... No es cuestión de llegar tarde a nuestra cita, ¿verdad? - dijo ironico cuando él mismo habia llegado tarde a su encuentro.

- Seguiremos otro día, ahora debemos visitar a un amigo tuyo. - Zanjo.